jueves, 23 de febrero de 2012

Las Rosas que nunca llegaron

Iba a tocar este tema el mismo día de San Valentín, ya que era justo el momento en que a las pobres mujeres solteras de pronto nos queda claro "estás sola"... No hay chocolates del príncipe encantado, ni rosas con melosas dedicatorias.  No hay un saludo a las 12 de "Feliz San Valentín" o la esperanza de una tarde con la persona que quieres (exista o no en tu propia vida XD)  Y no es que haya rehuído el tema escondida en un cascarón... Como siempre pasa en esta vida, me han seguido una serie de incidentes desafortunados. Y empezaron con una gripe fatal. El mismo día 14, pese a que me esforcé en llevar mis galletas decoradas con chocolate rosa y alegrar el día a mis compañeros, en la tarde estaba con fiebre. Por supuesto, el día tenía que ponerse peor, agregando una "tragedia inventada" (copyright de alguien) sobre una pelea con aquel "amigo" que tiene el poder de jugar con mi mente.

Dos días en cama, y San Valentín era uno de los últimos temas en mi cabeza. Ya pasados varios días, agregándole estrés laboral y una fiesta muy extraña con gente disfrazada, me tomé un tiempo para pensar en el tema... cuando se desata otra serie de eventos desafortunados que involucran mi deplorable salud, análisis médicos que afectan mi calidad de vida, alguien enviando corazoncitos virtuales a otra persona que no soy yo (#lalala), la falta de tacto de ciertas amistades para menospreciar el esfuerzo que supone seguir un régimen (algunos opinan que debería comer sólo pollo sancochado aunque la dieta me de más opciones) y una maleta manchada por un dulce que no debía comer -y no comí, porque se derritió en toda la maleta-. Como comprenderán... las últimas 10 horas empezó un grave colapso emocional que terminó en una imposibilidad de llorar (después del dolor de cabeza post-lluvioso) y mucho tiempo para pensar en las decisiones que debo tomar en mi vida.

Y de ahí vino San Valentín.  Por que al fin y al cabo, todo es culpa de San Valentín.  En mi página de FB puse como broma "Quiero rosas en San Valentín", mas o menos 1 semana antes de la fecha.  Mis amigas se rieron, y yo también, es decir, no hay nadie en mi vida que en este momento pudiera dar un paso adelante y decirme "eres importante en mi vida."  Sin embargo, había cierta esperanza de encontrar una sorpresa en ese día (claro que los bugs que eso ocasionaría en mi cabeza probablemente hubieran seguido dando bucles hasta hoy). Pero como era de esperar, no llegaron. Hubo demostraciones de cariño, sí, de muchas de mis amigas y amigos. Un amigo me dedicó una canción (y creo que a varios de sus amigos también.)  Un viejo amigo me mandó un mensaje de texto (siempre se acuerda de mí en Navidad, y hasta en el día de la madre para saludar a mi Mami). Pero no llegó ese príncipe, real o imaginario, a decirme "eres importante en mi vida." Lo que me pregunto es... ¿por qué me debería importar tanto?

Nunca he tenido una relación romántica. Lo crean o no, los que me conocen ya deberían saberlo. Así que cuando hace ya un buen tiempo tuve una "buena" amistad con alguien, mis alas se elevaron demasiado. Por supuesto, elegí a alguien que no me había elegido a mí, pero no tuvo las agallas de decirlo hasta después de que me hubiera enamorado (sospecho que no me "enamoré" en verdad, porque, para ser sincera, dicen que el amor es feliz con la felicidad del ser amado, y en mi caso no es así :P en absoluto, a veces le deseo el mal por más católica que sea) y de la forma más infantil que se le ocurrió.  Y desde entonces, me quedé confundida con el amor.  ¿Fue amor esa ilusión/amistad? ¿O es algo más que eso, que aún no encuentro? ¿Por qué aún me siento traicionada por alguien? Y cómo puedo esperar encontrar a otro alguien que me haga sentir menos sola... si es que realmente lo necesitase.

San Valentín puede ser una fecha muy especial para los que han encontrado un amor, una ilusión, una buena amistad, o lo que quieran llamarlo. Pero para los que no tenemos ese lazo, puede ser un momento de plantearnos muchas preguntas. ¿Eres tú -un tú... para todo el género opuesto- o soy yo?  ¿Llegará esa persona genial que nos comprenda? O debemos simplemente enfocarnos en la relación amorosa más importante de nuestras vidas: ¿nosotros mismos?.  No tengo las respuestas, por supuesto, pero algo en mi interior me llama a creer que el amor sí existe.  Lo veo en mis padres, en el matrimonio de algunas amigas, en las relaciones nacientes de personas que comparten mi día a día (tenía que mencionar a esa parejita XD).

Sólo me queda decir, que tal vez algún día lleguen las rosas. Nadie sabe lo que el futuro depara.



PD: Hoy pensé decirle a alguien que ya no quería volver a verlo. Pero al final dejé las cosas como están. Quien sabe si eso es lo mejor.

lunes, 13 de febrero de 2012

Galletas en forma de ♥

Cuando era niña, recuerdo vívidamente preparar postres con mi madre. Los clásicos: pie de limón, pie de manzana, suspiros a la limeña... y un largo etcétera.  Incluso recuerdo una vez que preparamos helado XD Pero algo que no solíamos hacer mucho era galletas.  Había una receta en especial que utilizábamos muy de vez en cuando que se terminaba con grajeas, las galletas de la Tía Ida (tía de mi madre). Era de mis favoritas.  Sin embargo, a causa de que nuestro horno no era muy bueno dejamos de hacer culaquier clase de galleta.  La receta especial fue después inmortalizada por mi tía Mari, hermana de mi mamá, y ella tomó finalmente el nombre... se volvieron las galletas de la tía Mari.

Muchos años después, cuando yo ya era adulta y ganaba un sueldo "interesante", decidí comprar una cocina nueva para mi casa.  Obviamente, gran alegría generalizada.  Ahora el horno no era un problema... Tuvo que pasar algo más, sin embargo, para que empezara con las galletas de nuevo.  Una amiga cercana salió encinta y el primer trimestre lo pasó muy mal (nauseas por doquier) Investigando por Internet, descubrí que un remedio casero para ello es el kión (gengibre) y decidí aventurarme a hacer galletas de gengibre, aprovechando además que era época navideña.  Salieron... bastante bien.

Empecé entonces unas pequeñas tradiciones... galletas en San Valentín (o chocolates si no tengo tiempo XD), galletas en Navidad, galletas en algún momento especial del año :P  Para este momento, ya tengo unas 3 recetas bien claras: Avena, Gengibre y las clásicas de la Tía Ida. 

En fin, se preguntarán por qué decidí hablar de las galletas el día de hoy. ¿Será tal vez que he pasado tres horas preparándolas? Pues sí, aunque aún no las he contado, debo haber horneado unas 100 galletas en forma de corazón para entregar a mis amigos el martes, día de la Amistad.  Aunque San Valentín genera ciertos "bugs" en mi cabeza (de los que hablaré en la siguiente entrada, post-San Valentín) la idea de tomarse un momento en dar una sonrisa a aquellos que llamas amigos, puede ser altamente gratificante.

Para terminar, una foto de las galletas antes de entrar al horno.  Pese a que mi dieta me prohíbe comerlas... digamos que dadas las reacciones de mis familiares (que las probaron) han quedado bien.  Mañana (hoy) me encargaré de bañarlas en chocolate rosa :P... creo  Z.Z


viernes, 10 de febrero de 2012

Mi amigo: el APIO

Si piensan que este es una oda a las virtudes nutricionales del Apio, lo siento.  Aunque lo considero uno de los mejores alimentos del mundo (recientemente) y se cumplen 2 semanas de que voy comiéndolo a diario el título es un engaño. Por otro lado, no es que vaya a hablar de alguien a quien llame APIO de cariño.  El Apio... es un símbolo... una prueba de que volví a entrar en esas etapas de la vida que tanto me han definido hasta ahora... ¡¡Estoy a Dieta!!

Wow. Decir esas palabras es simplemente estresante.  Desde mi última etapa similar, había evitado esa palabra. Cuando alguien decía "¿Y la dieta?" yo contestaba "¿Qué dieta?"  Y es que llega un momento en que de tanto subir y bajar de peso una llega a la etapa "me llegó." Pero vamos a empezar la historia por partes.

Enfermiza soy. Hipocondriaca, también.  Pero hay una razón para todo... De niña, mi asma definió varias partes de mi vida. La que no podía hacer educación física, una más del grupo de los inhaladores. Y la falta de ejercicio obviamente influyó en mi aumento de peso. Una de las terapias que mi madre escogió, fue una dieta anti-alérgica: nada de chocolates, ni chizitos, ni pescado, etc etc. Bajé de peso muy rápido. Para entonces, estaba a inicios de la adolescencia.  Y para sorpresa existencial, único año en que se me permitió ser Cheerleader (hay pruebas :P)

Pero de ahí, ese tratamiento terminó. Empecé a subir de peso.  Pasé por el Dr. Maceda (creo que así se llama), bajé... recuperé el peso. Ya en la universidad, fue le Dr. Pung... bajé, recuperé el peso. Salí de la universidad. Mis líos emocionales (soy una drama queen) me hicieron subir y subir de peso mientras compensaba mis propias carencias con la comida.  En ese entonces llegué al peor peso que he tenido.  Escuchen bien: 105 kilos U.U Ni yo lo creía. Además que en algunos análisis que me hicieron por otros problemas médicos, aparece que mi hipertensión está alta. ¬¬ Suena a problemas.

Y de pronto... pasó algo. Encontré una ilusión.. hmmm. Sin siquiera intentarlo, esta "alegría" nueva me hizo bajar 18 kilos en 4 meses. Y ni si quiera lo intenté. Como todo en la vida, la ilusión se convirtió en tragedia emocional. Y recuperé algo de peso. Pero no todo. Sin embargo, ese rush de pérdida de peso no se fue. De pronto me había vuelto más coqueta, ye empecé a buscar ropa más bonita que la que siempre me conformaba. Esta ilusión extraña como que generó una metamorfosis.

El año pasado, sin embargo, al ir al médico por una gripe, me indicó que teníamos que bajar como sea mi presión, que estaba alta nuevamente: Pastillas - Carísimas y me causan tos.  A los pocos meses, detectan que mi insulina está alta.  Querida Nats... no puedes seguir ignorando el problema... Así que, decidí tomar alguna acción drástica. Incluso me planteé el asunto de atacar a mi estómago con algún bisturí. Pero, con una inspiración divina... llegó a mi un nuevo plan. (El Plan Dunkan, si quieren mayor información) y pese a que planteaba un largo tiempo de dieta, tomaba mucho de la psicología que define mi relación con la comida y plasmaba ese sentimiento de "no comemos sólo porque tenemos hambre o somos antojadizos" Y eso me convenció.

Por otro lado, tras una sugerencia (en broma) de una compañera de trabajo que me sugirió comprar un apio en vez del helado que todos estaban comprando, investigué acerca de dicho vegetal. Decidí comerlo a diario para quitarme la manía de tener lago en la boca y por su aporte de "calorías negativas." Hoy se empieza el día 5 de la 1ra etapa del Plan Dunkan... hasta ahora, el único pecado cometido fue una bolita de papa que me estaba mirando (T.T) pero en todo lo demás, me he mantenido lejos de la tentación.

Veremos que tal me va. Para terminar, incluyo una foto de las tentaciones... me recuerda a un día que comí con una amiga y mi galán tradicional ;)




miércoles, 8 de febrero de 2012

¿Qué es esto?

Mmmm.  Si llegaron aquí vía "Clave de Luna" puede que no encuentren más de lo mismo.  Chaos;Nats es un blog nuevo que aún está en concepción.  Exactamente qué postearé aquí, es un misterio aún (aunque no tanto para mí, ya tengo algunas ideas) pero lo que es seguro, tratará de cosas más enfocadas en lo que pienso y/o siento y casi nada del Anime.

Por supuesto, siempre podría caer en el "oversharing", en el cuál sucumbió mi último intento de Blog Personal (no lo busquen, ya no existe :P) así que mantendré un poco el anonimato de aquellos que se me dé por mencionar de tanto en tanto.  Por otro lado, si me conoces, trata de no juzgarme por lo que escriba, trataré de ser lo más honesta posible. Y principalmente, no intenten averiguar quién es quién si es que no lo sacan a la primera. XD

Ahora me queda cambiar un poco el diseño de este blog, para que sea más Nats, y no tan "blogger éstandar" y definir un poco el estilo de las imágenes que colocaré.  Estoy pensando... ¿para algo tengo la cámara, no?

Nos vemos pronto